Arte Sagrado Católico y Cábala III:
La obra que publicamos y que vamos a tratar de analizar
cabalísticamente es “Alegoría
Eucarística con los Arcángeles” de 1750; elaborada por Miguel Cabrera, célebre
pintor mexicano del género “barroco”.
En la diagramación adjunta se puede observar, una vez más,
claramente, como los elementos dominantes de la composición se organizan
“espacialmente” según el esquema ya bien conocido del Adan Kadmon-Arbol de la
Vida.
Solo llamaremos la atención a algunos puntos resaltantes,
que pudiésemos considerar “nuevos” en lo que respecta a las otras obras que ya
hemos cubierto en esta colección:
•Arcángeles: En cabalacristianateista siempre nos hemos
sanamente desmarcado de ciertas tendencias que enfatizan de la cábala su afán
tabulizador, que tiende en ocasiones a enmarcar de más las concepciones sobre
la divinidad, haciéndolas inflexibles.
La angelología es un recurso de estudio que siempre debe ser
visto como un apéndice, ese es el rincón al que siempre la relego la
cristiandad prudentemente. Contemplar de más estas potencias nos puede acercar
al “culto a los ángeles”.
Esta es la razón por la que. otra vez, no veremos en estos
Arcángeles “arcángeles”, sino, como su disposición lo sugiere “Sefirots”. Claro
que, siendo los Sefirots, el arquetipo supremo, su clasificación organiza por
fractalizacion analógica, las ordenes angélicas, de modo tal, que cada uno de
estos reinos especializa en las zonas medias de la creación, particularidades
propias de estos aspectos de la Divinidad.
Llamaremos la atención en particular al hecho que en el
conjunto central, en el que vemos la Cruz Eucaristica, es Miguel, Príncipe de
los Ejércitos Celestiales, el único Arcángel al que de forma específica se le
dirigió oración en la Santa Missa, quien sostiene la Cruz. ¿Cómo sabemos que es
Miguel? , por la Armadura, ya que su atributo más emblemático es ser el
Arcángel Guerrero (Apocalipsis cap 12).
El que Miguel aparezca en el centro es importante, porque es
la posición “SOLAR”; En la correspondencia planetaria de los Sefirots, el Sol
corresponde a Tiferet, que es donde se EQUILIBRAN todos los aspectos ¿qué
significa esto?; veamos
En la Teogonia-Cosmogonia cabalística, en el acto de Dios
“expandirse” dentro de la contracción, el vacío matriz del mundo, significa un
acto de aparente “disolución” del Sí Mismo de Él, antes concentrado en el Punto
de Emanación que llamamos “Keter”; esta “expansión-disolución” hace que, en el
análisis racional del proceso, nuestras facultades contemplativas, nos los
muestren como “opuestos” o “distantes”; “demasiado especializados” entre sí
para poderse considerar un cuerpo funcional, un organismo; en esa visión
Tiferet asume el papel de MEDIADOR SINTETICO (Colosenses 1:20) del sistema, un
punto de re-concentración de Dios en un “Centro de Gravedad” que forza a “orbitar”
las influencias en torno a Si, la imagen de este Centro, no emanante, sino
dominante, es la del “Esplendor” que permite que Dios se nos haga
“Visible” por lo que viene a ser para
nosotros, en cábala cristiana, el lugar por excelencia para EL HIJO: “El resplandor
de su Gloria y La Imagen misma de su sustancia” (Hebreos 1:3).
•La Hostia en la Cruz: De más se ha comentado que la forma
de “La Hostia” está relacionada con los “Símbolos Solares”, es Jesucristo,
nuestro SOL de JUSTICIA (Malaquías 4:2); la Cruz central sobre la que se
encuentra funciona de forma exacta al sistema, el brazo vertical señala “El
Pilar Intermedio” y el brazo horizontal,
el llamado “Velo de Pakoret” , los “Tres Clavos” son “los tres “VAV”
ubicados precisamente en el Pilar Intermedio: Dath-Tiferet-Iesod; el soporte
divino de las tres almas del hombre. Neshama-Ruaj-Nefesh, realizadas y
perfeccionadas en Cristo.
•El Cordero con el Libro de 7 Sellos Abierto y Los Corazones
de José y María: Observemos el conjunto
central inferior que domina el esquema, el Cordero representa “El Cuerpo de
Cristo”; en este caso, como se nos dice en los cánones: “su cuerpo, su sangre,
su alma y su divinidad” el Cordero es a la Hostia, lo que el cuerpo es al alma,
su vehículo, y lo que es el alma de Cristo a su Divinidad, un trono, o como ya
se dice hoy claramente “una mercava”; por eso vemos esta figura en la región
yetziratica de formación, señalando el alma inferior, la carroza de
encarnación. Los Siete Sellos del libro aperturado por el Cordero de que se ocupa
Apocalipsis cap 4 al 6 son otra referencia a los Sefirots de la zona intermedia
del Seir Ampim, la palabra Sefer (Libro), está emparentada con Sefirot, y con
CIFRA (Numero); porque en los misterios cabalísticos contar (palabra que en
lengua i-eber significa a la vez numerar y relatar) es como discursear, para
Dios hablar y hacer matemáticas es lo mismo.
El querube cuyas alas hacen la unión y el soporte de los
Sagrados Corazones de José y María (las dos columnas del árbol buscando su
equilibrio y unión), se ubica justo en Iesod (región Lunar) , y podríamos decir
ser la contrapartida del Miguel que ministra, cual sacerdote, con la Cruz en el
centro del Tabernáculo. Leamos al respecto una de las más hermosas citas del
Zohar en este contexto: “El Santo le dijo: "Mira ahora al Tabernáculo y al
Joven; todo es mantenido en suspenso hasta que el Tabernáculo abajo fuera
construido". Sin embargo, no se ha de pensar que Metatrón mismo ayuda; el
hecho es que el Tabernáculo le pertenece a él, y Mijael, el Sumo Sacerdote, es
quien sirve allí, dentro del Tabernáculo de Metatrón, reflejando la función del
Sumo Sacerdote Superior arriba. Lo hace sirviendo dentro de ese otro
Tabernáculo, el oculto que nunca se revela, que está vinculado con el misterio
del mundo por venir. Hay dos Tabernáculos celestiales: El uno, el superior
Tabernáculo oculto, y el otro, el Tabernáculo de Metatrón. Y también hay dos sacerdotes: el uno es la Luz
primordial, y el otro, Mijael, el Sumo Sacerdote abajo.” Parashat Teruma
•
Algunas Generalidades: En la disposición de los Arcángeles,
sus indumentarias y accesorios de seguro se esconden muchos misterios sublimes
de importancia vital.
El cuadro en general es una Misa,
de la cual Miguel es el Sacerdote oficiante, quien ofrece en consagración la
Hostia, los demás son 4 acólitos y 2 monaguillos. Los colores de sus
vestimentas encajan con los misterios sublimes que representan según las tablas
simbológicas de correspondencias, salta a la vista el azul claro para Raziel,
el angel de Hojma, el Cielo Superior, porta la Corona para Cristo,
transfiguración de la Corona de Espinas. El de Bina, verde, porta el manto
sagrado, comienzo de las vestiduras, nos habla de la Tierra de los Vivientes,
vegetación y resurrección. Anael ubicado en HESED (Misericordia) de blanco
(pureza), porta el Cáliz de Salvación, Zadkiel, en Gebura, de marrón
(administración de lo corpóreo y terrenal), porta el Evangelio. El de HOD,
porta la Espada del Tormento, con el que es mortificado el Corazón de la
Dolorosa, ya que nuestros sufrimientos se original de esta región, de nuestra
condición de seres temporales en prueba.
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