Análisis del Plan Divino, visto como un sistema de Ecuaciones resuelto por el método de matrices. y el Análisis de la vida del hombre como una función. Misterios de los Tiempos Simultáneos
En el anterior blog se analizó al hombre en su preexistencia.
De esto se concluyó que esta preexistencia, que la llamamos Intención, era lo
que marcaba su vida en todos sus aspectos. También, se recurrió al recurso
matemático, para comparar esta intención con una función que relaciona el rango
de las decisiones frente al dominio de
las circunstancias (situaciones).
Como el hombre es un ente comunitario tiene una
serie de interacciones, tanto positivas como negativas. En estas, cada elemento
(entiéndase: humanos) es causa y efecto para otros. En consecuencia, el grupo
compuesto por todos los hombres latentes en este plano de causación primigenia,
deben ser armonizados.
Dios da curso a la creación en base a un proyecto
planificado, por lo tanto Su Intención priva sobre las demás, dando dirección a
su propósito. Es esto lo que hace necesario el balanceo del conjunto, para que
todas las funciones se enmarquen con este objetivo.
En la Mente Divina, en el Mundo de la Causación
Prexistente, en el que El evalúa, calcula la factibilidad de los universos
probables, en su contemplación, se presentan a su consideración, todos ellos,
con sus múltiples variaciones. Estas variaciones se diferencian entre sí por la
proporción de participación de uno u otro aspecto (Ley) y/o por las distintas
direcciones u opciones escogidas por las voluntades-intenciones frente a
distintos escenarios. Esa vastedad infinita de virtualidades no factibles,
entiéndase, cuya completacion no corresponde con el Arquetipo Ideal
Previsualizado y Pre-aspirado, son mundos fuera de la FORMA DIVINA, del
Resultado. La Existencia Divina de este Resultante matemático era conocido en
los misterios cabalísticos manejados en la más remota antigüedad humana, lo
demostramos con esta maravillosa cita del Rig Veda: “Del resplandor de la luz, del
rayo de las eternas tinieblas, surgen en el espacio las energías despertadas
del huevo y estas son las esencias, las llamas, los elementos, los
constructores, los números y la fuerza o el hombre divino (Adam Kadmon), LA
SUMA TOTAL” Himno de la Creación Rig Veda..
En medio de este mundo de opciones, de
probabilidades, hay un solo Universo Posible, una sola opción que satisface el
balanceo de las ecuaciones igualado a la Propuesta, lo que nos permite formular
la alegoría del proceso creativo como la solución de un sistema de ecuaciones
por medio del cálculo de una Matriz.
Veamos las aceradas intuiciones de los matemáticos
en el diseño de su jerga al dar nombre a estas estructuras de cálculo y
análisis. . ¿Matriz? ósea, lugar de gestación, de incubación, la nomenclatura,
el símbolo, es encerrar el grupo, conjunto de elementos vinculados o a
vincular, dentro de un par de grandes corchetes, que DE-LIMITAN a estos. Ella,
debe arrojar un DETERMINANTE (de-terminar) que se utiliza para solucionar el
sistema de ecuaciones.
Realizamos
una cadena de simplificaciones para poder articular el lenguaje, por lo vasto,
vertiginosa de la visión; la realidad, es que, es una especulación ambiciosa,
osada en cierta manera. Cada hombre, como micro-cosmo, no es una función, sino
un conjunto de funciones (aspectos), pero diremos que es una función, o, aún
más, diremos que es un elemento, de igual forma, un universo, es un sistema de
ecuaciones, un conjunto de funciones (elementos), pero diremos, para avanzar,
que un universo es una función.
Cuando Dios, en su inmanifestacion, se planteó el
resultado de la creación, visualizo lo que quería obtener al final; se propone un
sistema de ecuaciones en la que las incógnitas no eran el resultado, sino los elementos
que iban a formar parte. Dios en su infinita Sabiduría ligo este sistema a
grandes realidades que debían ser absolutas para el resultado conforme a Su Voluntad.
En este concepto queremos introducir nuevamente la idea de que los hombres son
estos elementos a ser regulados en la matriz universal que Dios formo en la
preexistencia por medio del conocimiento previo de las voluntades que tendían
hacia ciertas decisiones.
Con este conocimiento previo de las voluntades de
los hombres Dios arma todos los resultados y sabe de antemano el resultado
general, por medio de estas funciones intención. Así, Él toma todas estas
funciones intención y las balancea para que cada una se regule con la otra. ¿Por
qué necesita realizar este balanceo? Porque requiere encontrar un método no impositivo
en el que el hombre pueda dar el resultado que El Desea sin que se esté invalidando
su libre albedrio. Allí se cumple el equilibrio entre Necesidad y Libertad. Lo
hace introduciendo efectos o situaciones, mediante el Reinado Universal
(Fatal-Providencia) que van a ir dándole forma a él plan divino. Llevándonos a
las dos máximas del balanceo de la creación:
1)
Dios
equilibra la causa y los efectos de los hombres de forma que un efecto no
cambie más de lo necesario la función de la persona.
2)
Dios
regula la función de los hombres hacia un solo objetivo sin que se afecte las decisiones
intimas de los humanos.
Indicamos que esta revelación pareciese ser el
camino indicado para solucionar el debate histórico del “Determinismo vs El
Libre Albedrio”. Dios ajustando el curso del cause (causa) del fluir de la
corriente de causas y efectos, mediante la introducción de “fuerzas” calculadas
y proporcionadas finamente en instantes precisos según los valores arrojados en
la Gran Matemática, ejecutada en la inmanifestacion, en la que conoció las personas
en sus intenciones.
Estas personas, como intenciones, entiéndase,
POTENCIALES, son comparadas en la Escritura con semillas. La semilla es una
“forma compacta”, una “posibilidad” por no decir, una “probabilidad”. En la
célebre parábola de Cristo llamada “El Trigo y la Cizaña” Mateo 13:24-30; los ángeles
consultan a Dios si deben hacer una intervención contundente para obstaculizar
el crecimiento de la cizaña, es decir, impedir la manifestación del mal de
forma absoluta, suprimir la existencia de los condenados de facto; Dios
responde que no, que una medida de esa naturaleza afectaría el desarrollo
MACRO, del proyecto general (solución a la interrogante agnóstica sobre la
permisividad a la existencia del mal). Que al final, en la cosecha, se
desharían de los oponentes.